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Siguen siendo mejores pagadoras que los hombres y van ganando terreno en lo laboral.
Al igual que en años anteriores, esta Superintendencia entrega al mercado las publicaciones relativas a la séptima versión del estudio "Género en el Sistema Financiero Chileno" y resultados de la segunda "Encuesta de Antecedentes de Género del Sistema Financiero Chileno".
Cabe señalar que el primer estudio constituye una visión general de la participación de las personas, segregadas por género, en la demanda de servicios financieros. Específicamente, se analiza la cartera de créditos, la cartera de ahorro y los productos de administración del efectivo. Por su parte, la Encuesta de Género, analiza la población ocupada en la banca y en las cooperativas de ahorro y crédito fiscalizadas por esta Superintendencia.
Género en el Sistema Financiero
Este trabajo corresponde a la séptima versión del informe "Género en el Sistema Financiero", publicación desarrollada por la SBIF como parte de los compromisos ministeriales adquiridos en el contexto las políticas públicas en materia de equidad de género.
Entre las conclusiones más importantes, se puede destacar que las mujeres presentan respecto a los hombres:
Los indicadores agregados de bancarización (profundidad, cobertura e intensidad de uso de los servicios financieros), sitúan al país en una posición de liderazgo respecto a las economías de la región y en general respecto a las economías consideradas emergentes. La desagregación de dichas cifras según género, da cuenta del rol cada vez más relevante de las mujeres en la actividad económica, y en particular, en la demanda de servicios financieros.
La participación global de las mujeres en la demanda de servicios financieros (tanto de crédito como de ahorro), es superior a la participación de éstas, en la fuerza de trabajo y en la población ocupada a nivel nacional.
La incidencia del monto de crédito asociado a las mujeres, si bien es inferior a la participación femenina en la fuerza de trabajo, es consistente con el menor ingreso promedio que presentan las mujeres en relación a los hombres.
Otro hecho destacable, es que la proporción de la deuda por género destinada al financiamiento de vivienda, la cual es significativamente superior en el grupo de mujeres.
La participación de las mujeres, tanto en términos de número de cuentas como de saldo mantenido en productos asociados a la administración del efectivo (cuentas vista y cuentas corrientes consideradas en conjunto), es significativamente inferior a la participación que exhiben los hombres. No obstante, se observa en el último periodo (diciembre 2006-junio 2007), un incremento en la participación de las mujeres.
Los indicadores de cartera vencida y castigada segregados por género, dan cuenta de un comportamiento de pago significativa y sistemáticamente mejor en el grupo de mujeres. Los índices de protesto de cheques segregados por género también evidencian un mejor comportamiento de dicho grupo de clientes.
Encuesta de Antecedentes de Género en el Sistema Financiero Chileno
El informe presenta un enfoque de género de la población ocupada en la banca y en las cooperativas de ahorro y crédito fiscalizadas por la SBIF. Específicamente, se entregan antecedentes de la planta de personal desagregados simultáneamente por género y una serie de variables ocupacionales a junio de 2007.
Respecto a la versión previa de la encuesta, se incorporan importantes antecedentes adicionales. A la información sobre niveles jerárquicos y tipos de funciones desarrolladas por género, se agregan estadísticas de edad y nivel educacional.
Con la finalidad de facilitar la evaluación de la información presentada y permitir la comparación de los antecedentes de género con otros segmentos de la economía, se han utilizado categorías consistentes con las que habitualmente se presentan las cifras oficiales.
Numerosos son los estudios que dan cuenta de la existencia de brechas de género en el mercado del trabajo. El sistema financiero no escapa de tales diferencias, no obstante, las brechas identificadas, son en general, considerablemente más pequeñas que las que se dan a nivel agregado.
Si bien, la incidencia del empleo femenino en el sector financiero es superior a la de los hombres, se observan brechas relevantes tanto verticales como horizontales. En efecto, el empleo de las mujeres en el sistema financiero, es limitado en las posiciones de mayor responsabilidad jerárquica y se concentra en determinadas áreas funcionales.
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